Lo mejor de la semana 26 de Pequeños (grandes) placeres
Bienvenido/a la newsletter de Pequeños (grandes) placeres de la semana 26, un espacio donde encontrarás inspiración para llevar una vida más feliz: recomendaciones de libros, películas y pequeños momentos que vale la pena atesorar en el día a día.
Cada domingo recibirás un resumen con las entradas de la semana, para que puedas leerlas con calma. Además, siempre incluiré algo nuevo para disfrutar de la magia del fin de semana.
Esta semana he incluido las siguientes entradas:
1.- 23 de junio- Lecturas de verano: once recomendaciones
Cuando los días se alargan y el ritmo se desacelera, el verano se convierte en el mejor aliado de la lectura. Esta selección de 11 libros reúne historias que huelen a sol, campo, viajes y transformaciones: clásicos inolvidables, relatos íntimos, novelas de iniciación y voces contemporáneas que dialogan con el calor, la pausa y la emoción. Son lecturas que invitan al descubrimiento, a la nostalgia o al deseo de escapar. Desde la costa este americana hasta una isla desierta, cada historia encierra un verano posible.
Prepárate una bebida fría, busca sombra… y deja que un buen libro te acompañe estos meses de luz. 📚🌞
2- 24 de junio- La hoguera de San Juan: el inicio de algo
Las Hogueras de San Juan marcan, para muchos, el verdadero inicio del verano: un rito colectivo que mezcla fuego, emoción y tradición. Esta festividad, celebrada entre el 23 y 24 de junio, tiene raíces paganas ligadas al solsticio y fue posteriormente adaptada por el cristianismo para conmemorar el nacimiento de San Juan Bautista. En distintos lugares se vive de forma única, pero el fuego, los deseos y los rituales de purificación son universales. Desde saltar llamas hasta quemar lo negativo del año, la noche se convierte en un acto mágico de renovación. También se celebra fuera de Europa, como el Inti Raymi en Sudamérica.
Descubre en esta entrada el origen, los rituales y la emoción de una de las noches más simbólicas del año.
3.- 25 de junio- ¿Te has creado ya tu Buckect List del verano?
El verano es el momento perfecto para reconectar contigo mismo y disfrutar de lo simple con intención. Esta entrada te propone crear tu propia “Bucket List” veraniega, un mapa personal de deseos, planes y pequeños placeres organizados por áreas como hogar, mente, alma, relaciones y viajes. No se trata de cumplir objetivos, sino de celebrar momentos cotidianos que hacen especial cada día. Desde leer ese libro pendiente hasta bailar una playlist al atardecer, cada propuesta es una invitación a vivir con más presencia.
¿Te animas a escribir tu lista y saborear tu verano como nunca antes? 🌞📓✨
4.- 26 de junio-Cine con sabor a verano
El verano no es solo calor y descanso: es también un estado emocional que el cine puede capturar con una fuerza única. Esta selección de 11 películas reúne historias de descubrimiento, amistad, nostalgia, deseo y libertad, ambientadas en paisajes cálidos o bajo atardeceres inolvidables. Desde los campos italianos hasta una feria ochentera, desde un viaje en tren hasta una isla griega, cada título propone una forma distinta de vivir esta estación. Son películas que se sienten, que transforman una tarde cualquiera en una experiencia sensorial o emotiva.
¿Te animas a descubrirlas? Déjate llevar por el cine y encuentra tu propio verano en la pantalla.
5.- 27 de junio- 100 entradas, 100 historias
Hoy celebro algo que me hace mucha ilusión: esta es la entrada número 100 de este espacio que nació para guardar los pequeños placeres del día a día. Cien textos que, poco a poco, han ido formando una especie de diario íntimo hecho de momentos sencillos pero llenos de significado. Escribir aquí se ha convertido en un ritual que me ayuda a estar más presente y a agradecer lo cotidiano.
Para marcar este pequeño gran hito, comparto con cariño dos listas: las entradas que más habéis leído y las que más he disfrutado escribiendo. Entre ellas hay reflexiones sobre la primavera, la creatividad en la ducha, libros no leídos, sonrisas inesperadas y muchas otras cosas que, aunque pequeñas, iluminan los días.
Si alguna vez te has emocionado con un café caliente o una canción que llega justo a tiempo, este rincón también es para ti.
6.- 28 de junio- Joyas Literarias, la antesala de mi afición a la lectura
Las Joyas Literarias Juveniles fueron la puerta de entrada a un universo de aventuras, emociones y descubrimientos que marcaron mi infancia y mi pasión por la lectura. A través de sus páginas, conocí a personajes inolvidables y viajé por mundos lejanos desde la tranquilidad de mi habitación. Sus ilustraciones vibrantes y sus historias cautivadoras hicieron de cada tomo un tesoro. Más que cómics, eran lecciones de vida, empatía y sueños. Hoy, esas lecturas siguen latiendo en mí como un recuerdo luminoso. Si alguna vez te has preguntado cómo nace el amor por los libros, este es un viaje que necesitas.
Y como el domingo también merece ser celebrado, quiero compartir contigo uno de mis momentos especiales.
EL REGALO DE CAMINAR AL AMANECER
Con la llegada del verano, mis caminatas por la tarde han quedado en pausa. El calor ya no permite disfrutar del paso lento ni de la conexión con la naturaleza como antes. Es tiempo de sombra, de piscina, de “stand-by”. Pero algo dentro de mí sigue necesitando ese movimiento suave, ese contacto con el mundo en calma.
Así que he empezado a salir a caminar al amanecer.
No madrugo demasiado, pero lo suficiente para estar fuera antes de que el sol empiece a apretar. La ropa la dejo preparada la noche anterior, como una forma de compromiso conmigo misma. Me levanto, me visto casi en automático y salgo. Afuera, el único momento del día en que aún se siente el frescor. Ese aire que ha sobrevivido a la noche y que, por unos minutos, lo limpia todo.
Camino en silencio, con el mundo aún medio dormido. Las calles están vacías, los pájaros inician su concierto, y el sol se eleva sin hacer ruido, como si no quisiera molestar. El cuerpo despierta despacio, en sintonía con la luz. Siento cómo el aire fresco me acaricia los brazos, cómo los sonidos son más limpios, más amables. Todo parece estar en pausa, solo para que yo pueda disfrutarlo.
Y en estos paseos tranquilos, el paisaje me habla sin palabras. El verde intenso de la primavera, ese que parecía inagotable, empieza a apagarse poco a poco. Ahora todo se tiñe de amarillos pajizos, tostados, suaves. Como si el verano, sin hacer ruido, lo cubriera con una manta cálida y dorada.
Entonces pienso: la naturaleza se transforma sin prisa, pero sin pausa. Y nosotros también.
Cada día un poco. Cada paso un matiz. No soy la misma que salió a caminar hace unos días. Ni seré la misma mañana. A veces no se nota de inmediato, pero hay gestos, pensamientos, certezas que se deslizan dentro de uno como la luz del amanecer.
Observar el campo es observarme. Y en ese pequeño descubrimiento cotidiano, también hay un placer profundo, un momento de cuidado silencioso que me acompaña al volver a casa… justo cuando el sol empieza a brillar del todo.
Y eso, para mí, ya es verano también
Encontrarás otros momentos especiales en las entradas resumen de cada una de las semanas:
5. El gozo de escribir con el bolígrafo perfecto ✍️🖤
7. Primavera en una maceta: una margarita para mi hogar
8. Vuelta un día antes de vacaciones
9. Leer nada más levantarme un fin de semana de primavera