01 de junio- Lo mejor de la semana 22 y un desayuno especial
Semana 22 en Pequeños (grandes) placeres: Café del Mar, “Orgullo y Prejuicio”, lista de sueños, primavera creativa, Nature Writing, Burj-Khalifa
01/06/2025
Bienvenido/a la newsletter de Pequeños (grandes) placeres de la semana 22, un espacio donde encontrarás inspiración para llevar una vida más feliz: recomendaciones de libros, películas y pequeños momentos que vale la pena atesorar en el día a día.
Cada domingo recibirás un resumen con las entradas de la semana, para que puedas leerlas con calma. Además, siempre incluiré algo nuevo para disfrutar de la magia del fin de semana.
Esta semana he incluido las siguientes entradas:
1.- 26 de mayo- Dos mundos, un mismo sol: Café del Mar en Ibiza vs Abu Dabi
En mi primer viaje a Abu Dabi, descubrí el fascinante Café del Mar, un beach club elegante y vibrante con vistas increíbles, música chill-out y espectáculos al atardecer. Desde la piscina infinita y los cócteles creativos hasta las coreografías y luces que acompañan la puesta de sol, cada momento es una experiencia sensorial y festiva. Aunque diferente al ambiente íntimo y espiritual del Café del Mar en Ibiza, ambos lugares comparten esa magia del atardecer que invita a detenerse y simplemente sentir. Esta comparativa entre dos mundos, uno ritual y otro espectáculo, revela cómo cada lugar celebra a su manera la belleza del sol que se despide.
Si quieres conocer más detalles y sumergirte en esta experiencia, te invito a seguir leyendo. 🌅✨.
2- 27 de mayo- Un libro, una película: Orgullo y Prejuicio. Jane Austen
Este mes te invito a redescubrir “Orgullo y Prejuicio”, la novela inmortal de Jane Austen que celebra 250 años de la autora. Con su ironía sutil y una heroína adelantada a su tiempo, Elizabeth Bennet, esta historia va más allá del romance para ofrecer una crítica social que aún resuena. Además, la adaptación cinematográfica de 2005, dirigida por Joe Wright, añade una dimensión visual y emocional inolvidable. Tanto si ya conoces la obra como si nunca la has leído, es el momento perfecto para sumergirse en esta historia sobre amor, orgullo y autoconocimiento. ¡Descubre por qué “Orgullo y Prejuicio” sigue fascinando al mundo!
3- 28 de mayo- Crea tu lista “101 cosas que hacer antes de morir”
En esta entrada comparto una reflexión personal sobre la importancia de vivir una vida auténtica y plena, inspirada en el libro “Los cinco arrepentimientos de las personas antes de morir” y en la película “¡Ahora o nunca!”. Te invito a crear tu propia lista de “101 cosas que hacer antes de morir”, una herramienta poderosa para alinear tus sueños y deseos con tu propósito, y para recordar que nunca es tarde para empezar a vivir. Yo misma he empezado a escribir la mía en un cuaderno especial, y me encantaría que tú también lo hicieras. Si quieres darle un sentido más profundo a tu vida y empezar a soñar a lo grande, acompáñame y crea tu lista hoy. ¿Te animas?
4.- 29 de mayo- Primavera: un lienzo que florece ante mis ojos. Actividades con flores
Mayo se me escapa, pero antes de que termine quiero recordar que es el mes de las flores y de la primavera en su máximo esplendor. Salgo con mi cámara y mis sentidos bien despiertos a captar cada detalle: los colores, los aromas, la suavidad de los pétalos. En cada flor encuentro un universo y, de vuelta a casa, me gusta hacer collages o álbumes con esas imágenes, jugando con sus formas y colores para que la primavera dure todo el año. También aprovecho para crear manualidades con flores secas: postales, marcapáginas, velas... Me encanta que cada pequeño gesto me acerque más a la naturaleza.
¿Te animas a descubrir la belleza de la primavera conmigo? 🌼📖
5-. 30 de mayo- Nature Writing, cuando la naturaleza se convierte en palabras
El nature writing transforma la contemplación del paisaje en palabras llenas de emoción, combinando observación y reflexión personal. Obras como Walden, Canto yo y la montaña baila o Una trenza de hierba sagrada muestran que la naturaleza no es solo un escenario, sino una maestra que nos enseña sobre la vida, la comunidad y el tiempo. Este género nos invita a detenernos, a escuchar y a redescubrir nuestro lugar en el mundo. Nos recuerda que somos parte de un todo vivo y nos conecta con lo esencial, con la belleza, la resistencia y la introspección. 📖✨ ¿Te animas a adentrarte en estas páginas y dejar que la naturaleza hable? 🌿
6.- 31 de mayo- Burjkalifa, el edificio más alto del mundo
En esta entrada comparto mi experiencia única subiendo al Burj Khalifa, el edificio más alto del mundo, con una entrada premium. Desde la cálida bienvenida con café árabe, dátiles y pastas tradicionales, hasta la vista de 360 grados desde el nivel 148, cada detalle estuvo lleno de lujo, comodidad y vistas increíbles. Destaco la limpieza impecable de los baños, la tranquilidad del mirador y el inesperado recuerdo con fotos digitales. Aunque no pudimos ver el espectáculo de las fuentes, eso solo me da un motivo para volver.
¡Acompáñame a revivir esta experiencia y descubre todo lo que el Burj Khalifa tiene para ofrecer!
Y como el domingo también merece ser celebrado, quiero compartir contigo uno de mis momentos especiales.
El placer de un desayuno de hotel de cuatro estrellas
No sé tú, pero para mí, una de las cosas que más disfruto cuando estoy de viaje es el desayuno del hotel. Tanto es así que, incluso estando de vacaciones, me despierto un poquito antes. No porque tenga que hacerlo, sino porque me emociona la idea de empezar el día con calma, disfrutando de ese momento tan especial. La razón es simple: el placer de un desayuno de hotel de cuatro estrellas, de esos que convierten el simple acto de desayunar en un pequeño lujo cotidiano..
En cuanto cruzo la puerta del comedor, ya siento que el día empieza de forma distinta. La luz tenue, los sofás suaves, las mesas perfectamente preparadas y ese detalle encantador de la taza que me sonríe con un "Have a nice day" me dan la bienvenida. Es como si el hotel me susurrara: “relájate, aquí estamos para que disfrutes”.
Me siento frente a la mesa y respiro hondo. Hay un murmullo suave, el tintinear lejano de cubiertos, y el aroma del café recién hecho llenando el aire. Todo invita a saborear el momento. Me encanta esta sensación de tener tiempo, de no correr, de poder detenerme y disfrutar de cada detalle.


El café, caliente y aromático, me invita a decidir si lo tomo solo o con alguna de las leches que ofrecen: entera, de soja o de avena. Mientras, mis ojos se dejan seducir por el buffet: dulces irresistibles, pan recién horneado que cruje al cortarlo, frutas frescas y jugosas cortadas con esmero, y mis favoritos, los frutos secos y ese queso con membrillo que siempre me hace sonreír, recordándome aquel viaje donde se convirtió en mi ritual diario.
Camino despacio por cada estación: cereales crujientes, yogures cremosos, jugo de naranja vibrante y tarros de miel y mermeladas que brillan bajo las luces. Me sirvo un poco de todo, como si estuviera jugando: un trozo de pan con mermelada, un puñado de frutas, unas lonchas finas de jamón, y claro, un bocado de queso con membrillo.



Pero lo que realmente me transporta son los platos calientes. Los huevos revueltos, suaves y dorados; el bacon crujiente que deja en el aire ese aroma familiar de las mañanas de domingo en casa; las salchichas jugosas, los tomates asados que explotan de sabor con cada bocado. Todo presentado con mimo, como si estuviera pensado solo para mí.



Y para los golosos como yo, hay un rincón de tesoros dulces: churros crujientes, tortitas esponjosas que piden a gritos un poco de miel, tartas y bizcochos que parecen recién sacados de una pastelería casera. Lo mejor es poder probar un poco de cada cosa, sin prisas, sin pensar en calorías, solo disfrutando de este festín matutino.
Sé que no puedo probarlo todo, pero el simple hecho de poder elegir ya me hace sentir feliz, como un niño el día de Reyes. Cada mañana es distinta. Si estoy varios días, me gusta variar: un día más fruta, otro más pan con mermelada, otro día me dejo tentar por los platos calientes. Es un pequeño lujo, ese momento solo para mí antes de lanzarme a recorrer calles, monumentos y mercados.
Lo que más valoro es poder disfrutarlo con todos los sentidos: sentarme y respirar hondo, dejar que el aroma del café me despierte, sentir el calor del pan entre las manos, escuchar el crujido al partirlo, saborear cada bocado como si fuera un regalo. Porque en esos instantes, sin prisas y con toda la calma del mundo, ya estoy de vacaciones.
¿Y tú? ¿Te animas a madrugar un poquito para regalarte un desayuno así y empezar el día con una sonrisa?
Encontrarás otros momentos especiales en las entradas resumen de cada una de las semanas:
5. El gozo de escribir con el bolígrafo perfecto ✍️🖤
7. Primavera en una maceta: una margarita para mi hogar
8. Vuelta un día antes de vacaciones